viernes, 14 de mayo de 2010

Limbo

Suelo decir que algo, un plan o alguna cosa, se ha ido “al limbo” cuando se pierde por el horizonte y ya no soy capaz de distinguirlo. Cuando lo pierdo de vista, sí, pero además tengo una confianza infinita en que vuelva a aparecer, antes o después. Es decir que por ahora no está, pero en su lugar queda la esperanza de que no esté perdido del todo, y lo vuelva a recuperar.
 
No sé de dónde he sacado esa expresión, que es totalmente errónea (podéis consultarlo aquí), a no ser que consideremos esas cosas como almas que esperan su redención.
 
Mi particular limbo está bastante lleno a ratos, y otras veces muy vacío. Que el limbo esté vacío en principio es una satisfacción, pero también conlleva el no tener que esperar que aparezca nada en particular. La sensación de tener algo pendiente, algo especial que esperar, es reconfortante, porque sabes que la ilusión de recuperarlo será mayor tras el largo tiempo que has aguardado. Ahora mismo el limbo no está muy lleno, sólo a medio camino entre la ilusión de recuperar y la tristeza de perder.
 
Quizá publicando la lista alguien me pueda ayudar, indicarme dónde buscar, o dónde permanecer acechando pacientemente a que aparezcan y resurjan las siguientes cosas. Allá vamos:
 
- Tengo en este limbo un pendiente que perdí hace un mes o poco más. Para mí era del par más bonito que tenía, o igual el más nostálgico, porque entre 70 pares es difícil hacer comparaciones. Los compré en Italia en Abril del 98. Odio perder pendientes, y no es frecuente, pero éste es el que más me ha dolido, con diferencia.

- Un mandala, del que ya conté la historia.

- Un amigo y medio de otro; esto es más complejo, las distancias (de todo tipo) suelen complicar las cosas.

- Tengo un antiviaje por hacer, con el 10 de la Naranja Mecánica F.C., aplazado infinitamente porque aún no ha llegado el momento de desaprovechar el tiempo; el antiviaje representa todo aquello que no me suele gustar al planear unas vacaciones, pero yo qué sé, me apetece ir con él por una vez así. Qué le vamos a hacer: me gustaría ir una semana a no hacer nada a una isla (Lanzarote estaría bien), a un hotel con pensión completa y sin nada que hacer más que ir a la playa, pasear, comer, dormir, etc. (etcétera, quiero decir). No creo que aguantáramos más de 2 días en ese plan, por eso escojo Lanzarote, porque debe de ser preciosa, para conocerla.

- Un picnic, una merienda con manta de cuadros y cesta de mimbre, también sabéis la historia.

- Tengo muchas rutas por el monte en el limbo, por lo mala que ha sido esta temporada en todos los aspectos (está siendo), y cada vez que hacíamos un plan veíamos desde el sofá cómo se iba al traste en pocos minutos. La frase más repetida ha sido: a ver si el año que viene… Pues eso, el año que viene las rescataremos del limbo.

- Un libro que no encuentro, y que encima fue un regalo. Desde entonces siempre pongo mi nombre en los libros, para que no haya líos. “La insoportable levedad del ser” de Milan Kundera (¡lo siento!).

- También tengo una excursión a Pirineos mil veces planeada, de esas de pegarse palizas a andar durante varios días, y volver exhaustos a casa, pero con una sonrisa difícil de borrar incluso mientras duermes.

- Tengo una cinta de música que presté y no sé si me devolvieron o no, pero no aparece. Realmente ahora me da igual, pero durante un tiempo me volví loca buscándola, debía de ser importante en mi vida (en mi vida anterior). Ahí va la confesión: B.S.O. de Grease.

- Un toro de peluche de esos rellenos de arena, antiestrés, que llevaba en la bandeja de La Leona, y en una mudanza desapareció. Pero en cualquier momento asomará entre algunas cajas, o bajo el asiento del coche.

Y basta ya por hoy. Me quedan en el tintero algún que otro objeto y algún que otro propósito que por más que se planee nunca sale, pero los guardo para mis confesores más íntimos.

Si veis alguna de las cosas de mi limbo vagando por ahí, por favor, avisadme inmediatamente.

5 comentarios:

Borf dijo...

El libro creo que lo tengo yo :-S

La domadora de truenos dijo...

Jaja, me lo has des-regalado! Yo también tengo uno que te he des-regalado, pero no te pierdes mucho (al contrario que yo).
Por cierto, el de "La irresistible..." sí lo tienes, ¿no?

Miguel Masero dijo...

Solo rezo por no ser yo el que tenga la B.S.O. de Grease!!!!

Aunque el "Aigatchiis amondeplayen" lo bordaba.

P.D.: Veo que Pamplona no se atisba desde el Limbo,... que se yo, no es por meter cizaña, pero....

La domadora de truenos dijo...

No, tranqui, no creo que la cinta la tengas tú (aunque de mano en mano nunca se sabe).
Respecto a Pamplona es cierto que me lo he dejado, pero es que ya roza lo inconfesable, ni siquiera delante de los más íntimos me atrevo ya a nombrarlo. ¿Acaso tú sí?
PD: a pesar de ser el resultado final similar, si yo lo escribiera no coincidiría ni en una letra. ¿Aigatchiis amondeplayen?

Anónimo dijo...

¡Que buena has sido por no contar lo del mando de la Leona!...y por no decir las veces que tu madre está en el otro limbo.